Quienes me siguen hace un tiempo, saben que emigramos en familia a España y que hemos traído con nosotros pocas cosas materiales.
Trajimos nuestro hogar (el amor de familia) y nuestras “cosas” quedaron en nuestra casa de Argentina, muy bien cuidadas.
Ahora bien, acá vivimos en un piso en alquiler y amueblado, por lo que sólo he realizado cambios estéticos y funcionales para que podamos adaptar nuestra vida a nuevos espacios.
Llegó el momento de comenzar a incorporar a nuestro hogar, objetos que tengan sentido para cada uno de nosotros. Desde elementos de vajilla, pasando por texturas, tejidos, adornos, cuadros, etc.
De a poco, iremos eligiendo esos objetos que nos despierten felicidad y complementen nuestras actividades.
Objetos que nos inviten a vivir espacios, nos acompañen a crear recuerdos y nos inspiren.
Así que doy por inaugurada una nueva sección en mi blog, en Pinterest y aquí también.
Un objeto, una historia.
Inaugura la sección, un objeto que traje conmigo desde Argentina ( de las poquísimas cosas que vinieron con nosotros).
Esta manta con textura “nido” tejida, era un elemento que usábamos mucho a la hora de conversar en el living (salón), mirar tele o para salir al parque los días de frío.
Y yo la traje… es increíble que habiendo dejado tantas cosas, haya elegido traer una manta, no? Pero la traje, y pensarlo me reveló una pregunta.
¿Traje conmigo una manta o traje con ella los recuerdos que guarda?
Esa manta que me abrigaba en el jardín, mientras tomaba mate y mi perra me pedía mimos, o mi gata usaba para acurrucarse.
Esa manta que acunaba sueños de mis hijos dormidos en el sillón
Esa manta que los calentó en nuestro vuelo hacia una vida nueva.
Qué importante es esa manta! Y cuánto valor tiene verdad?
Porque las cosas, comunidad linda, no sólo son cosas. Muchas de ellas, guardan y nos revelan nuestros más lindos recuerdos.
Qué tengan una linda semana.
Gracias por estar ahí
Ana
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